La educación está en camino hacia una revolución impulsada por tecnologías emergentes como la inteligencia artificial (IA), la cadena de bloques (blockchain) y la realidad virtual (RV). Estas tecnologías tienen el potencial de transformar la forma en que los estudiantes aprenden y los profesores enseñan. En este artículo, vamos a explorar cómo estas tecnologías impactarán en la educación de una manera que cualquier persona pueda entender.

Antes de sumergirnos en los detalles, es importante entender qué significa que una tecnología sea emergente. En pocas palabras, una tecnología emergente es aquella que está en desarrollo y tiene el potencial de tener un impacto significativo en varios campos. Además de la IA, blockchain y RV, hay otras tecnologías emergentes como el Internet de las Cosas, la tecnología 5G, la robótica, la biotecnología, la computación cuántica, entre otras.

Empecemos por definir brevemente qué es cada una de estas tecnologías y luego exploraremos cómo se aplican en el ámbito educativo.

Inteligencia Artificial (IA): La IA es una tecnología que permite a las computadoras aprender y pensar de manera similar a los humanos. Puede realizar tareas como reconocer voz, recomendar películas o incluso conducir automóviles sin ayuda humana. En la educación, la IA puede personalizar el aprendizaje, automatizar la evaluación de los estudiantes y proporcionar asistentes virtuales que respondan preguntas y brinden retroalimentación.

Cadena de bloques (Blockchain): La cadena de bloques es un libro de registros digital que guarda información de forma segura, transparente e inmutable. Cada vez que se actualiza el libro, se genera un registro único y todos los participantes de la red verifican y aprueban los cambios. En educación, la cadena de bloques se puede utilizar para almacenar de manera segura certificados, diplomas y otros datos sensibles. También puede facilitar la creación de plataformas de aprendizaje descentralizadas. 

Realidad Virtual (RV): La RV permite a los usuarios sumergirse en entornos virtuales a través de dispositivos como cascos o gafas. Los estudiantes pueden realizar excursiones virtuales a lugares remotos, participar en simulaciones interactivas y experimentar un aprendizaje inmersivo. La RV también fomenta la colaboración y el trabajo en equipo, incluso a distancia.

Aplicaciones 

Estas tecnologías tienen aplicaciones prácticas en la educación que pueden mejorar la forma en que los estudiantes aprenden y los profesores enseñan. Aquí dejaremos ejemplos para IA, Blockchain y Realidad Virtual / Aumentada:

Inteligencia Artificial:

Aprendizaje personalizado: puede rastrear el progreso y los estilos de aprendizaje de los estudiantes para proporcionarles contenido e instrucción personalizados, lo que facilita un aprendizaje más efectivo y eficiente.

Automatización de calificaciones: puede calificar automáticamente las tareas y exámenes de los estudiantes, liberando tiempo para que los profesores se enfoquen en otros aspectos de la enseñanza.

Asistentes virtuales: Los asistentes virtuales impulsados por IA pueden responder preguntas de los estudiantes, brindar retroalimentación y ayudar a mantenerse al día con los estudios y las políticas estudiantiles. Harvard, pionera en educación, ya está reinventándose ocupando asistentes virtuales en cursos de programación masivos.

Blockchain:

Certificados inmutables: La cadena de bloques puede garantizar la seguridad y la transparencia de los datos sensibles en la educación, como certificados y registros académicos. De esta forma los empleadores y los graduandos no necesitan una copia física de su certificado o diploma sino que a través de página web o un app puedes validar tu mismo que la persona cursó y finalizó un estudio en específico. 

Plataformas de aprendizaje descentralizadas: La cadena de bloques puede permitir la creación de plataformas de aprendizaje descentralizadas, lo que brinda a los estudiantes un mayor control sobre su educación y acceso a recursos de alta calidad. 

Realidad Virtual / Aumentada: 

Excursiones virtuales: Parte esencial de nuestros recuerdos en la escuela fueron las excursiones. En esta ocasión con Realidad Virtual los límites no existen, permite a los estudiantes explorar lugares remotos, históricos y otros destinos sin salir del aula, enriqueciendo su experiencia de aprendizaje.

Simulaciones interactivas: Proporciona entornos simulados donde los estudiantes pueden practicar habilidades específicas de manera segura y realista. Lo anterior habilita en las personas una nueva forma de estimular la velocidad y profundidad del aprendizaje; por ejemplo extendiendo figuras trigonométricas cómo si las tuvieras frente a ti  o incluso aprender a reparar una máquina con RV que nos permite ver y desarmar un “gemelo digital” de la máquina real. 

Colaboración y trabajo en equipo: permite a estudiantes y maestros conectarse y colaborar en entornos virtuales compartidos, sin importar su ubicación geográfica. Esto incluso permite continuidad en la educación y facilita la adaptación ante amenazas como epidemias, terremotos o cualquier evento natural que evite a los alumnos y maestros estar en un salón de clase. Cómo la tecnología cambiará la educación para siempre

La educación está en camino hacia una revolución impulsada por tecnologías emergentes como la inteligencia artificial (IA), la cadena de bloques (blockchain) y la realidad virtual (RV). Estas tecnologías tienen el potencial de transformar la forma en que los estudiantes aprenden y los profesores enseñan. En este artículo, vamos a explorar cómo estas tecnologías impactarán en la educación de una manera que cualquier persona pueda entender.

Antes de sumergirnos en los detalles, es importante entender qué significa que una tecnología sea emergente. En pocas palabras, una tecnología emergente es aquella que está en desarrollo y tiene el potencial de tener un impacto significativo en varios campos. Además de la IA, blockchain y RV, hay otras tecnologías emergentes como el Internet de las Cosas, la tecnología 5G, la robótica, la biotecnología, la computación cuántica, entre otras.

Empecemos por definir brevemente qué es cada una de estas tecnologías y luego exploraremos cómo se aplican en el ámbito educativo.

Inteligencia Artificial (IA): La IA es una tecnología que permite a las computadoras aprender y pensar de manera similar a los humanos. Puede realizar tareas como reconocer voz, recomendar películas o incluso conducir automóviles sin ayuda humana. En la educación, la IA puede personalizar el aprendizaje, automatizar la evaluación de los estudiantes y proporcionar asistentes virtuales que respondan preguntas y brinden retroalimentación.

Cadena de bloques (Blockchain): La cadena de bloques es un libro de registros digital que guarda información de forma segura, transparente e inmutable. Cada vez que se actualiza el libro, se genera un registro único y todos los participantes de la red verifican y aprueban los cambios. En educación, la cadena de bloques se puede utilizar para almacenar de manera segura certificados, diplomas y otros datos sensibles. También puede facilitar la creación de plataformas de aprendizaje descentralizadas.

Realidad Virtual (RV): La RV permite a los usuarios sumergirse en entornos virtuales a través de dispositivos como cascos o gafas. Los estudiantes pueden realizar excursiones virtuales a lugares remotos, participar en simulaciones interactivas y experimentar un aprendizaje inmersivo. La RV también fomenta la colaboración y el trabajo en equipo, incluso a distancia.

Aplicaciones 

Estas tecnologías tienen aplicaciones prácticas en la educación que pueden mejorar la forma en que los estudiantes aprenden y los profesores enseñan. Aquí dejaremos ejemplos para IA, Blockchain y Realidad Virtual / Aumentada:

Inteligencia Artificial:

Aprendizaje personalizado: puede rastrear el progreso y los estilos de aprendizaje de los estudiantes para proporcionarles contenido e instrucción personalizados, lo que facilita un aprendizaje más efectivo y eficiente.

Automatización de calificaciones: puede calificar automáticamente las tareas y exámenes de los estudiantes, liberando tiempo para que los profesores se enfoquen en otros aspectos de la enseñanza.

Asistentes virtuales: Los asistentes virtuales impulsados por IA pueden responder preguntas de los estudiantes, brindar retroalimentación y ayudar a mantenerse al día con los estudios y las políticas estudiantiles. Harvard, pionera en educación, ya está reinventándose ocupando asistentes virtuales en cursos de programación masivos.

Blockchain:

Certificados inmutables: La cadena de bloques puede garantizar la seguridad y la transparencia de los datos sensibles en la educación, como certificados y registros académicos. De esta forma los empleadores y los graduandos no necesitan una copia física de su certificado o diploma sino que a través de página web o un app puedes validar tu mismo que la persona cursó y finalizó un estudio en específico. 

Plataformas de aprendizaje descentralizadas: La cadena de bloques puede permitir la creación de plataformas de aprendizaje descentralizadas, lo que brinda a los estudiantes un mayor control sobre su educación y acceso a recursos de alta calidad. 

Realidad Virtual / Aumentada: 

Excursiones virtuales: Parte esencial de nuestros recuerdos en la escuela fueron las excursiones. En esta ocasión con Realidad Virtual los límites no existen, permite a los estudiantes explorar lugares remotos, históricos y otros destinos sin salir del aula, enriqueciendo su experiencia de aprendizaje.

Simulaciones interactivas: Proporciona entornos simulados donde los estudiantes pueden practicar habilidades específicas de manera segura y realista. Lo anterior habilita en las personas una nueva forma de estimular la velocidad y profundidad del aprendizaje; por ejemplo extendiendo figuras trigonométricas cómo si las tuvieras frente a ti  o incluso aprender a reparar una máquina con RV que nos permite ver y desarmar un “gemelo digital” de la máquina real. 

Colaboración y trabajo en equipo: permite a estudiantes y maestros conectarse y colaborar en entornos virtuales compartidos, sin importar su ubicación geográfica. Esto incluso permite continuidad en la educación y facilita la adaptación ante amenazas como epidemias, terremotos o cualquier evento natural que evite a los alumnos y maestros estar en un salón de clase. 

El futuro de la educación está siendo moldeado por estas tecnologías disruptivas. Desde el aprendizaje personalizado hasta las excursiones virtuales, estas tecnologías tienen el potencial de transformar la forma en que los estudiantes adquieren conocimiento y cómo se entrega de manera eficiente y atractiva. Estamos presenciando un cambio en la forma en que se enseña y se aprende, y solo podemos imaginar cómo nuestros nietos aprenderán en el futuro.

El futuro de la educación está siendo moldeado por estas tecnologías disruptivas. Desde el aprendizaje personalizado hasta las excursiones virtuales, estas tecnologías tienen el potencial de transformar la forma en que los estudiantes adquieren conocimiento y cómo se entrega de manera eficiente y atractiva. Estamos presenciando un cambio en la forma en que se enseña y se aprende, y solo podemos imaginar cómo nuestros nietos aprenderán en el futuro.