Centro Escolar Católico Marista celebra la acreditación de su Proyecto Educativo Institucional.

Víctor Montalvo
Centro Escolar Católico Marista

En un acto lleno de emoción y orgullo, el Centro Escolar Católico Marista celebró la acreditación de su Proyecto Educativo Institucional (PEI), un reconocimiento que valida su compromiso con una educación de excelencia, basada en valores humanos y cristianos. Este logro no solo consolida su modelo pedagógico, sino que también refuerza su misión de formar personas íntegras, comprometidas con la sociedad.
Este PEI forma parte del proceso de innovación educativa que impulsa la Provincia Marista de América Central, y refleja el trabajo articulado de todos los centros en la construcción de un modelo común que responde a los desafíos del presente con identidad, fe y creatividad.
Un proyecto con alma y propósito
Para el Centro Escolar Católico Marista, este proyecto no es solo un requisito administrativo, sino una expresión de su filosofía educativa, inspirada en los valores de San Marcelino Champagnat: solidaridad, fraternidad y amor al trabajo.
Una comunidad educativa comprometida
El éxito de este proceso no hubiera sido posible sin la participación activa de todos los integrantes de la comunidad Marista:
- El equipo directivo y consejo educativo: que con su liderazgo estratégico guió cada etapa del proyecto.
- Los docentes: quienes, con dedicación y creatividad, llevan el PEI a las aulas día a día.
- El personal administrativo: esencial en la gestión y logística que sostiene la institución.
- Los estudiantes: protagonistas del proceso y destinatarios de una formación integral.
- Las familias: cuyo apoyo y confianza son fundamentales en el desarrollo educativo.
Educación integral: más allá de lo académico
El modelo educativo Marista se distingue por su enfoque en el desarrollo humano y espiritual, complementando la excelencia académica con programas de formación en valores, pastoral juvenil y proyectos sociales. La acreditación del PEI confirma que esta metodología no solo cumple con los estándares nacionales, sino que también responde a las necesidades de un mundo en constante cambio.
“Educar no es solo transmitir conocimientos, sino acompañar a los jóvenes en su crecimiento como personas”, destacó una docente durante el evento. Este principio se refleja en iniciativas como talleres de liderazgo, voluntariados y actividades culturales que enriquecen la experiencia estudiantil.
Un futuro con más desafíos
Con esta acreditación, el Centro Escolar Católico Marista reafirma su compromiso de seguir evolucionando. Entre los próximos objetivos destacan la incorporación de nuevas metodologías activas y el fortalecimiento de su vinculación con la comunidad.
Como parte del Proyecto Educativo Institucional promovido en toda la Provincia, el PEI se convierte también en una herramienta de comunión educativa, que articula el trabajo de los centros maristas en torno a un mismo horizonte evangelizador y pedagógico.
La ceremonia de celebración cerró con un mensaje claro: la educación marista sigue viva, transformando vidas y construyendo un futuro mejor. Para las generaciones actuales y venideras, este logro es una promesa de que su formación estará siempre guiada por la excelencia, la fe y el servicio a los demás.
Este PEI forma parte del proceso de innovación educativa que impulsa la Provincia Marista de América Central, y refleja el trabajo articulado de todos los centros en la construcción de un modelo común que responde a los desafíos del presente con identidad, fe y creatividad.
Un proyecto con alma y propósito
Para el Centro Escolar Católico Marista, este proyecto no es solo un requisito administrativo, sino una expresión de su filosofía educativa, inspirada en los valores de San Marcelino Champagnat: solidaridad, fraternidad y amor al trabajo.